El Cupping o Terapia con Ventosas es una terapia muy antigua y universal. Consiste en hacer un efecto de vacío en el cual la ventosa se pega al cuerpo, succiona la piel y parte del músculo. Por lo tanto abre los poros y mueve la circulación sanguínea y linfática.
Los efectos fisiológicos que tiene la aplicación de ventosas son los siguientes:
- Aumento de irrigación sanguínea.
- Alivio del dolor.
- Aumenta circulación linfática (disminuir edemas).
- Aumenta el metabolismo celular.
- Aumento del oxígeno y nutrientes de los tejidos.
- Hiperemia local.
- Liberación miofascial.
- Activa el sistema inmunitario.
- Depurativo (eliminación de toxinas).
- Tratar contracturas y rigidez muscular (efecto relajante).
- Terapia antiinflamatoria y analgésica.
- Reduce los síntomas de alergia, fatiga crónica y fibromialgia.
- Mediante la aplicación de ventosas se aumenta el riego sanguíneo con lo que las reacciones químicas de la zona se producen con mayor rapidez. Por ejemplo en contracturas musculares, se facilita que las sustancias de desecho que han quedado retenidas se evacúen y al mismo tiempo llegan más nutrientes necesarios para realizar las funciones del músculo. Se facilita al mismo tiempo la eliminación de adherencias, al favorecer una separación de los tejidos con el efecto de tracción de la ventosa.